Mujer en Rosa

 En la cultura Cherokee, las mujeres podían decidir ser guerreras o esposas. Si optaban por esto último, eran ellas quienes elegían al interfecto, y si lo deseaban, podían pedir un tiempo para vivir con él, antes de la ceremonia de boda y ver si "daba el ancho" como proovedor.  Una vez casada, si querían divorciarse, solo tenían que dejar las pertenencias del ñor en la entrada, no tenían que justificarse y ellas mantenían la misma honorabilidad ante la sociedad. Nadie le pedía explicaciones, ni siquiera el marido, a ese nivel confiaban en la justicia femenina; ninguna de ellas tomaba estas decisiones a la ligera, justamente en ellas recaía este peso porque a la mujer se le consideraba justa, sensata, prudente e inteligente.  El rol de "ama de casa" era importantísimo y respetado porque la familia era la unidad social predominante y solo las mujeres eran aptas para estar al frente, esto les daba poder económico, social y político, incluso en los consejos de guerra, c...

Lo bueno con el tiempo siempre mejora. 💜💜💜

¿Te  has planteado alguna vez cómo es la empresa en la que trabajas? ¿Su propósito es acumular riqueza? ¿Forma parte del virus cultural? O, ¿por el contrario tiene en cuenta su Responsabilidad Social?  Me encanta la visión que tiene este hombre sobre el tema. No os perdáis su magnifica explicación.💜   

  A principios del siglo XX, el mundo vivía una época de cambios frenéticos. La sociedad se estaba transformando y el arte, como reflejo de su tiempo, lo hacía también al mismo ritmo. Artistas como Vasili Kandinsky, Piet Mondrian o Kazimir Malévich, se atrevieron a apostar por una pintura que se alejaba progresivamente de los límites de la realidad hasta despedirse de ella por completo. Un lenguaje que se consideró revolucionario y que hizo que pasaran a la historia como auténticos pioneros de la abstracción. Sin embargo, en esta misma época existió una pintora cuyo legado no corrió la misma suerte. Y es que, para 1911, año en el que Kandisky publica su tratado ‘De lo espiritual en el arte’, el que se considera el manifiesto de la abstracción, esta audaz artista ya llevaba varios años coqueteando con un lenguaje rupturista, atrevido y, sobre todo, abstracto. Su nombre es Hilma af Klint y sus pinturas fueron tan audaces que fue ella misma la que mandó encerrarlas durante décadas, es...

 Laia Abril es una artista barcelonesa que acaba de ganar el Premio Nacional de Fotografía, el máximo galardón nacional en su campo. Fuente: Mahala Nuuk Conseguir que el Centro Nacional de Arte y Cultura Georges Pompidou de París, uno de los museos de arte contemporáneo más importantes del mundo, compre tu obra y la exponga es, para un artista, un logro que vale una carrera. De la misma manera, ganar el Premio Nacional de Fotografía de España, dotado con 30 mil euros, el premio más prestigioso del país, puede ser, también, la consecución a la obra de toda una vida. Laia Abril ha alcanzado ambas cimas sólo en este mes de septiembre. Basta entender la importancia de estos logros para comprender la magnitud del trabajo de Laia Abril, una artista de Barcelona que con sólo 37 años y casi dos décadas de carrera a sus espaldas recibe ahora los premios que la consolidan como uno de los talentos más sólidos de la fotografía artística contemporánea del país. Cinturón de castidad en On Rape -...

                                                            Simplemente una maravilla.                  💜💜💜

Este escrito lo he encontrado por las redes, no sé quién es el autor, simplemente me parece genial. Si alguien lo sabe que me lo comunique. Gracias. "Si miramos con atención, podemos detectar la aparición de un nuevo grupo social que antes no existía: personas que ahora tienen entre sesenta y ochenta años. A este grupo pertenece una generación que ha expulsado la palabra envejecimiento de la terminología, porque simplemente no tiene la posibilidad de hacerlo en sus planes actuales. Es una verdadera novedad demográfica, similar al auge de la adolescencia; en ese momento, que también era un nuevo grupo social, que surgió a mediados del siglo xx para dar identidad a una masa de niños en flor, en cuerpos adultos, que no sabían, hasta entonces, adonde ir ni cómo vestirse. Éste nuevo grupo de humanos qué ahora tiene unos sesenta, setenta u ochenta años, llevó una vida razonablemente satisfactoria. Son hombres y mujeres independientes que trabajaron durante mucho tiempo y lograron cambia...